A pesar de que muchas personas siguen creyendo en el estereotipo del mexicano flojo y holgazán, como ha ocurrido durante varios años, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) volvió a ubicar a México en 2013 entre la lista de los países que más horas trabajan.
Y es que en un informe anual entre las 34 nacionalidades que la integran, la OCDE dio a conocer que los mexicanos trabajan al año alrededor de 519 horas más que un estadounidense promedio.
La diferencia parece abrumadora, y lo es aún más sabiendo que el organismo internacional ha considerado que el mexicano común trabaja incluso más que los habitantes de países que durante mucho tiempo han sido estereotipados por su "devoción" y "entrega" al trabajo, como Corea o Japón, según rescata el diario La Opinión en su portal de Internet.
Pero a pesar de ser uno de los países más trabajadores, México sigue enfrentando graves desigualdades sociales que hacen que el ingreso del trabajador promedio se ubique en niveles muy bajos.
Según cita La Opinión, la OCDE ha revelado que el salario de un mexicano promedio (9.985 dólares) es cinco veces menor que el de un estadounidense (54.450 dólares).
Grandes retos para los trabajadores mexicanos
De acuerdo con el diario mexicano El Universal, la OCDE dio a conocer en meses pasados un informe titulado "¿Cómo va la vida"? en el que precisa que los mexicano trabajan un promedio de 2 mil 250 horas por año, lo que contrasta con las mil 776 horas por año que los ciudadanos del resto de países integrantes del organismo internacional.
Las causas para que el esfuerzo de los trabajadores mexicanos no se vea reflejado en su economía se deben, entre otras cosas, a la baja cotización del salario, a la productividad y a la desigualdad de género, lastres que han sido difíciles de dejar atrás en una nación con grandes desigualdades sociales.
Y es que no todo es esfuerzo para el trabajador mexicano. Según rescata La Opinión, los asalariados de México pierden 40% del tiempo de su jornada laboral en distractores que minan su productividad, por lo que su rendimiento es menor comparado al de otros trabajadores.
Además de esta estadística, el informe "Panorama de la educación 2013" realizado también por la OCEDE arroja estadísticas desalentadoras.
De acuerdo con este reporte publicado recientemente, la tasa de desocupación mensual hasta septiembre de este año se ubicó en 5.3 por ciento para el total de la población (5.1 y 5.5 por ciento para hombres y mujeres, respectivamente). Niveles están por encima de los observados en el mismo periodo en 2012, año en el que las tasas se situaron en 5.0 para el total (4.7 hombres y 5.4 para mujeres), no dejan lugar a dudas sobre la difícil situación que enfrentan los jóvenes que quieran ingresar al mercado laboral.