La mujer que fuera brutalmente atacada por un chimpancé que mutiló y desfiguró su rostro y manos en 2009 en Connecticut, solicitó el permiso de demandar al Estado por $150 millones de dólares en daños y perjuicios, narrando en público los momentos de horror y la ardua lucha que ha tenido que vivir después del ataque.
Charla Nash, de 60 años de edad, se presentó ante el Comité Judicial de la Asamblea General de Connecticut, en silla de ruedas y con la cabeza cubierta por gasas blancas para solicitar la autorización de demandar al Estado acusándolo de saber lo que estaba pasando y portante indiferente a su dolor y protegerla.
La mujer, quien ha sido sometida a múltiples cirugías entre ellas a un trasplante de rostro, pidió a los legisladores del estado aprobar una ley que anule la decisión del Comisario J.Paul Vance Jr., quien en junio pasado negó su petición de renunciar a la inmunidad soberana de Connecticut de demandas, de acuerdo a Reuters.
El cuerpo de abogados de Charla Nash ha señalado que el Departamento de Energía y Protección Ambiental de Connecticut había descrito como ilegal la posesión de un chimpancé de 200 libras, además de calificarlo como una amenaza para la seguridad pública.
"Quiero que la oportunidad de pagar mis cuentas médicas y vivir una vida cómoda. Pero también quiero asegurarme de que lo que me pasó nunca le sucede a alguien más nunca más", declaró Nash.
Sin embargo, el fiscal general George Jepsen, instó a los legisladores a rechazar la solicitud de Nash, asegurando que acceder a sus peticiones seria "abrir las compuertas a pleitos sobe la responsabilidad del estado, condenándolo a la bancarrota.
Charles Willinger, abogado de la víctima, aseguró que el caso habla sobre la negligencia sistémica, institucional del Departamento de Energía y Protección del Medio Ambiente, desde el comisario hasta el fondo de su fuerza policial, por lo que solicitan al tribunal determinar si existió o no negligencia por parte del Estado.
En el video presentado a los legisladores, se puede ver a Nash narrando lo difícil que ha sido su vida desde el día del ataque y se puede ver a la mujer en un centro médico donde vive y recibe atención diaria.
Nash fue atacada en la casa de su amiga y jefe Sandra Herold por un chimpancé mascota, Travis, quedando ciega y desfigurada del rostro, además de perder parte de sus manos y brazos.
Nash presentó una demanda contra Herold, quien murió en 2010. En 2012 se llegó a un acuerdo por la cantidad de $4 millones de dólares, equivalente a casi el total de las posesiones de Harold.
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