First Posted: Jul 24, 2013 05:54 PM EDT

Cuando una relación de pareja llega a su fin se experimenta con sensaciones de depresión, y se llega a buscar el problema por el cual se causó la ruptura amorosa. Sin embargo de acuerdo a LaTercera.com un análisis realizado por la Universidad de Kingston en el Reino Unido, dio a conocer que después de un divorcio las mujeres denotan mayor felicidad.

El estudio se aplicó a un grupo de 10 mil personas cerca de 20 años y de acuerdo a sus resultados también se observó que, aunque ambos sexos se muestran satisfechos después de cuatro años de haberse divorciado, su nivel de felicidad dependerá de la misma que manifestaron antes de contraer matrimonio.

Cuando las parejas llegan a divorciarse hay algunos cambios entre el hombre y la mujer en cuanto a sus niveles de felicidad, primero después de dos años ambos se colocan en un nivel de felicidad similar al del otro, solo que a partir de ese punto los niveles de felicidad del hombre comienzan a descender. El hombre, ahora ex esposo, comienza a experimentar de nuevo una buena felicidad hasta que han pasado cinco años desde su divorcio.

A diferencia de los resultados que presentaron las mujeres durante la prueba, ellas se mantienen en una satisfacción y felicidad elevada desde el año y medio de la ruptura. Esta felicidad que ellas llegan a experimentar se compara a la misma que sentían antes de contraer matrimonio, lo cual no pasa con los hombres.

Seguro algunas personas piensan que los hombres son los más felices al divorciarse y apostarían porque las mujeres son las más infelices e incluso a ser las más propensas para entrar a una depresión, pero el estudio y sus resultados dictan todo lo contrario, sin duda las mujeres recuperan su estabilidad emocional y felicidad más rápido que un hombre después del divorcio.

Sin embargo aún no se descarta la influencia que pueden tener los diversos factores que llevan a una pareja a su separación, esto puede ser porque realmente la mujer o el hombre ya son infelices, lo cual daría alivio y satisfacción a esta persona que el divorcio se llevara a cabo. Por otro lado también podría ser que un hombre tenga dificultades para adaptarse de nuevo a una vida de soltero después de haber compartido largos años de pareja, en donde quizá algunos de los roles de la casa no él no los realizaba. 

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