First Posted: Jan 31, 2014 03:48 PM EST

Los tiroteos mortales en escuelas de Estados Unidos se han convertido en los últimos años en escenarios cada vez más comunes. La reciente ola de incidentes violentos ocurridos en universidades y colegios estadounidenses ha alertado a las autoridades y ciudadanos ya que estos hechos parecen estarse convirtiendo en un problema cada vez más recurrente en este país.

De acuerdo con un reportaje reciente realizado por la reportera Liliana Escalante para la cadena de noticias Univisión, los tiroteos en escuelas estadounidenses han alcanzado un máximo histórico, ya que en lo que va del 2014 se han registrado 11 balaceras con resultados fatales en diferentes colegios de Estados Unidos, una cifra alarmante si se tiene en cuenta que durante todo el 2013 se registraron 28 eventos de este tipo.

De acuerdo con un perturbador editorial publicado recientemente por The Wire,  desde principios de enero de 2014 se han registrado 11 tiroteos que tuvieron lugar en una escuela, o cerca de una secundaria o universidad, la mayoría de los cuales fueron planificados y llevados a cabo por un estudiante. 

Ante este preocupante escenario, las autoridades educativas han reaccionado con un viraje con respecto a la forma en la que anteriormente se aproximaba al problema de la seguridad en las escuelas. Según un reporte publicado por The New York Times, los profesores de escuela ahora están menos preocupados por difundir instrucciones sobre qué hacer en casos de incendios o siniestros naturales como huracanes y terremotos.  

Ahora los profesores enseñan a los estudiantes cómo esconderse detrás de los estantes o mostradores, y a alejarse de sus lugares en caso de registrarse un tiroteo. Además de esto, las autoridades escolares se han unido con los departamentos de policía locales para asegurar que ningún alumno ingrese armas en las escuelas con revisiones cada vez más exhaustivas.   

Esta "epidemia" de tiroteos en las escuelas de Estados Unidos, sin embargo, no ha logrado que un tema fundamental sea estudiando con mayor profundidad por los congresistas. En la mayoría de los estados de EE.UU el acceso legal a municiones y armas de fuego es tan laxo que prácticamente cualquier persona puede conseguir una pistola o un rifle con un mínimo de requisitos.

Según rescata Univisión, las medidas que el presidente Barack Obama prometió implementar para lograr a nivel nacional un mayor control de las armas de fuego no han prosperado en el Congreso.

Dos medidas que reducirían considerablemente el acceso a las armas en ese país, una enmienda bipartidista sobre la verificación de antecedentes de los compradores de armas y una propuesta para prohibir las armas semiautomáticas de tipo militar y los cargadores de municiones de alta capacidad, no han tenido el apoyo de los legisladores, lo que deja un escenario incierto en un país que presenta una espeluznante lista de masacres en sus escuelas. 

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