La industria de los videojuegos es un fenómeno global. Hay más de 1.2 mil millones de videojugadores alrededor del planeta, con ventas proyectadas que rebasan los $100 millones de dólares anuales.
Los videojuegos frecuentemente son acusados de causar violencia y adicción. Sin embargo, tres décadas de investigación no han logrado producir un consenso entre los científicos.
En unos estudios de laboratorio, científicos han descubierto un incremento de 4% en niveles de agresión entre los videojugadores, después de jugar títulos de violencia.
Pero otros grupos de estudio han arrojado que los factores como el historial familiar, la salud mental o simplemente ser hombre, son temas importantes que determinan los niveles de agresión.
Los videojuegos moldean nuestro cerebro. Ahora lo confirman los científicos, recoge BBC News. Algunos afectan de manera positiva a las capacidades cognitivas del mismo, otros, alertan los científicos, con frecuencia generan adicción, pérdida del sentido de la realidad y pueden fomentar conductas crueles.
Lo que es cierto, es que la ciencia ha fallado en encontrar el enlace de los actos violentos entre los videojuegos y el mundo real.
Pero fuera de la controversia, un creciente cuerpo de trabajo está empezando a mostrar estos juegos en una perspectiva diferente.
Para probar si los juegos podrían traer beneficios similares a los jugadores de edad avanzada, el programa Horizon de la BBC reclutó a un pequeño grupo de voluntarios mayores de un complejo de viviendas protegidas en Glasgow.
Aprendieron a jugar un popular título de go karts, acumulando alrededor de 15 horas en un lapso de cinco semanas. Su proceso de memoria y atención fue puesto a prueba antes y después del programa
En promedio, ambos resultados incrementaron por un 30 por ciento.
A pesar de que fue una pequeña prueba, estudios más largos serán realizados para explorar los efectos de los videojuegos.
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