Una serpiente pitón ganó la batalla en contra de un cocodrilo Johnson en el lago Moondarra al norte de Queensland, Australia, devorándolo en tierra.
La impresionante lucha fue captada en fotografías por Tiffany Corlis, quien narró a la BBC el inicio y término de la pelea entre reptiles.
"Fue increíble ", dijo Tiffany Corlis a la BBC. "Vimos a la serpiente peleando con el cocodrilo - ella rodeó al cocodrilo para sujetarlo mejor y enrolló su cuerpo alrededor de las piernas del cocodrilo para mantenerlo apretado", añadió.
La lucha inició en las aguas del lago Moondarra y según Alyce Rosenthal, otro testigo citado por medios locales, la batalla pudo haber durado hasta cinco horas.
Después de muerto el cocodrilo, la pitón de 10 metros se desenrollo y una vez en Tierra se colocó frente a él para devorarlo íntegramente.
Tras la noticia de la épica batalla, el experto en reptiles, Terry Phillip, en entrevista con la revista National Geographic, indicó que el peso de ese tipo de serpiente oscila entre los 7 y 9 kilos, mientras que el cocodrilo tiene un peso estimado de 2 ó 3 kilos y un metro de largo, contra los 10 metros de la serpiente de Oliva, conocida por su fuerza y habilidad para alimentarse de animales de gran tamaño.
Un estudio de la revista Biology Letters de la Royal Society, publicado en 2002 y citado por la BBC, indicó que las serpientes pueden sentir el latido del corazón de sus presas y soltarlas en cuento dejan de sentirlo, aplicando solo la energía necesaria en la pelea.
Terry Phillip señaló que normalmente las serpientes pitón contraen a su presa hasta la asfixia y detener las paredes cardiacas; sin embargo, los cocodrilos pueden pasar mucho tiempo sin respirar, por lo que la serpiente pudo haberse detenido en el momento en el que dejó de sentir los latidos de su presa, señalando un paro cardiaco como la causa más segura de muerte en el cocodrilo.