El Día de Acción de Gracias se celebra cada cuarto jueves de noviembre en Estados Unidos, siendo el próximo 26 de noviembre de este año cuando las familias se reúnan y compartan la cena, estelarizada por un pavo horneado.
Este pavo se prepara como muchos preparamos el también tradicional pavo navideño, horneado y relleno al gusto; sin embargo, en las casas americanas, el pavo va acompañado de gran variedad de ensaladas, siendo las patatas otro protagónico de las mesas.
Muchos hispanos prefieren no celebrar esta fecha ya que sienten que es algo para los estadounidenses, pero si nos dan el fin de semana libre y podremos pasar gran tiempo con la familia, ¿Por qué no celebrarlo?
Pero, qué pasa cuando comenzamos a extrañar los platillos que hacía la abuela en este tipo de reuniones, las salsas bien picosas, el olor de los pimientos asados, ahogarte por el aroma del chile en la lumbre, las tortillas para esas personas que no comen sin tortilla en mano, un buen café de olla.
Podríamos seguir con la lista, pero porqué no mejor te damos unos tips para que hispanicemos este Día de Gracias.
Un Pavo Marinado
Algunos gustan de rellenar o bañar el pavo en vino mientras se prepara, pero ¿qué pasa cuando lo hacemos con limón? Sí, marinemos nuestro pavo en jugo de limón antes de hornearlo y lo dejamos reposar por unas horas, si es preferible, una noche entera. Una vez que tengamos el pavo listo para hornear, le colocaremos cebolla, tomate y un poco de consomé.
¿Te gustan las alitas? este pavo será ideal para ti. Ahora que si no te gusta el pavo, puedes hacerlo con pollo.
A la mexicana
¿Por qué esperar a que sea Noche Buena? aprovechemos esta fecha para acompañar nuestro pavo con unos romeritos y, para no perder el toque americano, le agregamos unas papas asadas.
¿No te gustan los romeritos, pero te gusta el mole? Rojo, Verde, Poblano, de Pipián, ufff... Como decirle que no. El mole suele ir servido en el plato, así que puedes preguntar antes de servir, pero también puedes colocar el mole en la mesa, como si fuera una salsa al gusto.
Que te parece este relleno de pavo: carne molida con chorizo y chiles al gusto picados.
Para empezar
No sólo de pavo vive el hombre. Iniciemos con algo ligero, una sopa azteca o un mole de olla para agarrar calor para la noche, picoso como el de la abuela.
A la colombiana
¿Se te hizo similar el relleno mencionado arriba? ¿que tal si acompañamos el pavo con una buenísima bandeja paisa? A ver a quién le queda espacio para el postre.
Mejor algo más ligero, qué tal un ajiaco calientito para prender motores.
Para empezar o para terminar, no puede faltar una olla de tamales. ¿por qué colombianos? vuelve a hacer esa pregunta después de haberlos probado.
A la cubana
¿Quién dijo que tiene que ser pavo? muchas familias cubanas prefieren preparar un jugoso pernil y créeme, si lo pruebas hasta vas a dudar del pavo. Muy fácil de preparar, pocos ingredientes como la pimienta negra o aceite de oliva, pero todos son clave para el sazón.
Para acompañar el pavo podemos preparar unas calabazas con mojo. Muchos escapan de las calabazas pero el sabor de las calabazas bañadas en la salsa mojo nos hará preguntar cuánto falta para el próximo Thanksgiving
A la venezolana
Aprovechemos la fecha y preparemos unas deliciosas hallacas y ¿por qué no? unas hallacas especiales de pavo, por qué tenerlo enfriando al centro de la mesa si podemos mantenerlo caliente y listo para servir.
Si no eres venezolano o colombiano, al ver hallacas las confundirás con tamales, pero estos son más jugosos (y deliciosos) ya que la harina con la que se preparan es sazonada anteriormente con caldo de gallina o de pollo.
Volvámonos internacionales, si eres mexicano prepara un pernil, si eres venezolano prepara un ajiaco. Toda cocina hispana es deliciosa y que mejor que aprovechar el Día de Gracias que darle gracias a la comunidad hispana que hoy reside en los Estados Unidos
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