La presencia de las corrientes del aire permiten que los vuelos entre América y Europa sean más rápidos, sin embargo, esa realidad podría cambiar producto del calentamiento global.
Un estudio de la Universidad de Reading, en Reino Unido, asegura que "es muy probable que el calentamiento global aumente la velocidad de las corrientes en chorro. Ello hará, por ejemplo, que el tiempo de vuelo desde Europa hacia Estados Unidos aumente, mientras que el del trayecto inverso disminuirá", sostiene BBC.
Por otro lado, una investigación publicada en la revista Environmental Research Letters, coincide que "el aumento de la velocidad en las corrientes en chorro de la atmósfera hará que suban las emisiones de los aviones, el consumo de combustible y el precio de los pasajes de avión", aporta El Comercio.
"Las corrientes en chorro en los hemisferios norte y sur son unos vientos potentes que ayudan a mover los sistemas climáticos de todo el planeta", explica el corresponsal de medio ambiente de la BBC Matt McGrath.
Esta posible transformación del ambiente producto del calentamiento global desencadenará en que "los vuelos desde Londres serán dos veces más propensos a durar más de siete horas. Mientras que los viajes desde Nueva York a la capital británica serán dos veces más propensos a durar unas cinco horas y 20 minutos", concluye Entorno Inteligente.
Finalmente, el impacto global hará que los que van hacia el este son cada vez más rápidos, pero no tanto como los vuelos hacia el oeste que tardan más.
Kristopher Karnauskas, de la Universidad de Colorado en Estados Unidos, asegura que el "estudio demuestra que hay una relación recíproca entre el cambio climático y los vuelos de avión" (...) "Creo que estos resultados son un paso importante en completar el gran rompecabezas que es esta intrincada relación que los humanos tenemos con el sistema climático", agregó BBC Mundo.
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