First Posted: Jun 28, 2016 05:03 PM EDT

Las policías y fuerzas armadas de México cometen actos de tortura y violación en contra de mujeres de forma "rutinaria" para conseguir confesiones y mostrar buenos resultados en la llamada lucha "anti-crimen", denunció este martes una investigación realizada por Amnistía Internacional (AI).

El reporte "Sobrevivir a la muerte. Tortura de Mujeres por policías y Fuerzas Armadas en México" es el resultado de una investigación de ocho meses, en los que se logró entrevistar a 100 mujeres encarceladas en 11 prisiones federales de México. El informe, de aproximadamente 50 páginas, ha puesto una vez más bajo los reflectores las acciones de las fuerzas de seguridad policial y militar mexicanas, ya que, se asegura, el abuso y la tortura se han convertido en una herramienta "de rutina".

Erika Guevara Rosas, directora de las Américas de Amnistía Internacional, destacó que las 100 mujeres consultadas dijeron haber sido torturadas psicológica y verbalmente. De ellas, 97 recibieron violencia física y 72 sexual, en tanto que 33 fueron violadas.

"Los testimonios de estas mujeres pintan una fotografía totalmente escandalosa sobre el nivel de tortura contra las mujeres en México, aún bajo las normas locales. La violencia sexual como tortura parece haberse convertido en una parte rutinaria de los interrogatorios", explicó Guevara Rosas.

El panorama es todavía más alarmante, ya que además de los relatos en los que se describen actos de tortura como violaciones tumultuarias de policías y soldados, descargas eléctricas en los genitales, las fuerzas armadas gozan de impunidad y los agresores nunca son castigados.

"La respuesta de las autoridades a estas violaciones de derechos humanos ha sido sumamente desalentadora, La tortura y otros malos tratos continúan, y sus autores gozan de una impunidad casi absoluta, pese a que el Gobierno mexicano ha establecido varios mecanismos e instituciones para abordar el problema", señala AI, según rescata El Mundo.

De acuerdo con el mismo medio, las autoridades mexicanas han rechazado que la tortura sea una práctica generalizada y afirman que se trata de hechos "aislados" en los que se trabaja para castigarles. Amnistía Internacional, sin embargo, detalló que aún cuando las mujeres presentaron denuncias ninguno de sus agresores han sido detenidos.

"Es realmente alarmante el informe, porque estamos hablando que la tortura sexual se vuelve el método preferido de las fuerzas armadas y de seguridad de este país. Estamos hablando que de 100 mujeres, todas alegaron haber recibido algún tipo de violencia psicológica o verbal. Realmente son cifras escalofriantes y lo peor es que el gobierno sigue sin castigar prácticamente a casi ningún soldado o policía por estos hechos", dijo a Sin Embargo Madeleine Penman, investigadora de tortura para México de la Oficina Regional para las Américas de Amnistía Internacional.

Pese al alto número de denuncias, las autoridades mexicanas han afirmado que en los últimos cinco años sólo se han presentado seis cargos de violación contra funcionarios públicos en la justicia federal.

Siete soldados fueron juzgados por violación en 2012 y 2013 por tribunales. A pesar de esto, entre 2010 y 2015 ningún miembro del Ejército fue suspendido por delitos sexuales. Sólo tres marinos fueron suspendidos por abuso y uno fue condenado, pero inhabilitado sólo hasta salir de prisión.
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