El sacerdote y luchador mexicano, Fray Tormenta, se encuentra en problemas con las autoridades, después de haber sido acusado de abuso sexual en contra de un joven de 16 años de edad que vivió en una casa hogar que el luchador administraba.
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Graciela Galvany Pescador, titular de la Procuraduría para la Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del Sistema DIF Naucalpan, interpuso la denuncia contra el sacerdote, cuyo verdadero nombres es Sergio Gutiérrez Bénitez.
De acuerdo con información compartida por el diario Vanguardia, en la carpeta de investigación 554530360044516, abierta el pasado 11 de mayo, la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM)investiga a Fray Tormenta por presuntamente haber abusado sexualmente de un menor de 16 años identificado con las siglas GSR.
Las autoridades detallaron que los hechos habrían tenido lugar en el año 2014, cuando la víctima fue trasladada del albergue municipal de Naucalpan Naimiqui Pilli a la "Casa Hogar Cachorros", en Texcoco, Estado de México, que es administrada por Fray Tormenta.
La casa hogar del luchador pidió más tarde a personal del albergue municipal ir a recoger al menor, ya que había sido reportado por mal comportamiento y consumo de drogas. Según consta en la denuncia penal, fue ese mismo día cuando el menor manifestó "diversas situaciones" y hechos presumiblemente constitutivas de los delitos de violación y abuso sexual.
Las autoridades dicen que es posible que los abusos sexuales no sólo se habrían realizado en contra del menor, y se investiga si hubo más víctimas y si los hechos fueron realizados por el sacerdote y luchador profesional retirado.
Según rescata el portal especializado en temas del deporte, Medio Tiempo, Fray Tormenta ha negado las acusaciones, pero reconoció que el menor sí estuvo en su albergue y que, de hecho, fue él mismo quien pidió su salida ya que no podía controlar su adicción a las drogas.
"Probablemente sea de un muchacho que estuvo conmigo de allá de Naucalpan, y precisamente yo le hablé a ella (a la Procuradora) porque se drogaba muchísimo, entonces yo le hablé diciéndole que no podía estar ahí, incluso yo le dije a este muchacho que lo iba a llevar a hacer un antidoping y no quiso", indicó el sacerdote, según rescata el medio citado.
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