Un hombre en custodia arrestado bajo sospecha de haber cometido dos tres asesinatos con una escopeta el pasado domingo fue acusado formalmente este martes por otros dos disparos, uno de ellos con consecuencias fatales, informó la Policía de Los Ángeles.
Alexander Hernández, un hombre de 34 años, fue arrestado el domingo por la muerte de una persona y dos perros, así como de intento de asesinato durante una serie de tiroteos ocurridos el sábado, pero la investigación reveló que el hombre había disparado fatalmente en contra de tres personas horas antes de su arresto.
De acuerdo con la agencia Reuters, Hernández disparó su escopeta en varias ocasiones durante un lapso de una hora este domingo en el Valle de San Fernando, antes de que pudiera ser arrestado por las autoridades.
Según rescata la fuente citada, los investigadores analizaron evidencia sobre un caso de crueldad animal ocurrido el sábado, lo que los llevó a relacionar a Hernández con la muerte de dos mujeres y un hombre quienes fueron baleados la tarde de este domingo.
El comandante de la Policía de Los Ángeles, Andrew Smith, dijo a Reuters que el sospechoso fue arrestado la noche del domingo y las primeras indagatorias sugieren que actuó solo. Los detectives de homicidio confirmaron que el hombre utilizó la misma arma para asesinar a los dos perros el sábado y a varias personas el domingo.
Según rescata el diario Los Angeles Times, el domingo pasado, Hernández abrió fuego en contra de una familia de cinco integrantes que se encontraban frente a una iglesia de Valle de San Fernando. Una joven de 23 años de edad murió a consecuencia del tiroteo, mientras que sus dos padres fueron heridos y se reportan en estado crítico.
Los hermanos de la joven resultaron con heridas leves y su vida no corre peligro, informaron las autoridades.
Minutos más tarde, Hernández disparó fatalmente a un hombre de 29 años de edad que caminaba solo afuera de un centro de recreación cercano al primer tiroteo. 10 minutos más tarde, el hombre asesinó a una mujer de 59 años que esperaba a un amigo antes de ir a una iglesia.
Las autoridades dijeron que no hay evidencia hasta el momento que ligue a las víctimas con el sospechoso, y los investigadores no han identificado un móvil para los asesinatos.
La policía de Los Ángeles dijo que está investigando otros tiroteos sin resolver en la región con características similares para establecer si el sospechoso está relacionado o no.
