En una entrevista publicada esta semana, el Senador de Florida, Marco Rubio, compartió sus opiniones sobre la inmigración, que difieren inmensamente de sus opiniones previas.
Según Breitbart News Network, hace un año, Rubio trabajó con el Sen. Chuck Schumer, D-NY, para aprobar "una ley migratoria que daría ciudadanía a millones" de indocumentados.
Ahora, sin embargo, el Senador Republicano está en contra de la reforma.
El Martes, Rubio envió una carta al Presidente Barack Obama detallando su rechazo a la forma. En lugar de eso, recomienda asegurar la frontera con "detección estratégica, cámaras, más personal en la frontera ... E-Verify ... un sistema de rastreo de entrada y salida para encontrar aquellos que entraron legalmente y permanecen aquí ilegalmente porque se quedan con visas expiradas."
Rubio también quiere crear un proceso hacia la ciudadanía que toma años en concretarse y está basado en mérito, donde a los inmigrantes se les permite entrar al país "principalmente en base a habilidad y talento, no en base a si tienen un familiar que vive aquí."
"Continúo creyendo que nuestro sistema debe ser reformado y he aprendido en el año pasado que debido a tal increíble falta de confianza en el gobierno federal sin importar quién esté a cargo, la única manera de asegurar que puedas manejar este problema es al asegurar la frontera primero y asegurar que la inmigración ilegal esté bajo control," dijo Rubio.
El Senador está en contra de que Obama tome acción ejecutiva para resolver la crisis migratoria, y dice que retrasaría la reforma.
"Simplemente exarcerbaría la falta de confianza de la gente en la voluntad del gobierno de hacer valer la ley, y también creo que continuaría agregando ambigüedad a las leyes que han creado la crisis humanitaria que ahora existe en la frontera," explicó. "Eso no lo digo yo. Lo dijeron los Presidentes de Guatemala y Honduras, cuando vinieron a Washington hace unas semanas..."
Además, Rubio criticó el programa de Acción Diferida para Llegadas en la Infancia, que entró en efecto en 2012. El programa retrasa la deportación para aquellos que llegaron al país durante su niñez y han vivido e ido a la escuela en el país desde 2007. El Senador cree que programa no debería "ser la política de los Estados Unidos indefinidamente."
"Estoy dispuesto a ser razonable sobre cuando termine, ya sea en dos años, un año, seis meses, tres años, pero debe terminar," dijo.
Rubio es un potencial candidato presidencial para el 2016, no no ha decidido oficialmente si competirá.
