First Posted: Jul 23, 2013 12:03 PM EDT

Alexander Bradley, el hombre que alega haber sido disparado por Aaron Hernández el 13 de febrero tras un altercado en Florida, testificó el martes ante el gran jurado que decidirá si procesar o no a la antes superestrella de fútbol americano por el asesinato de Odin Lloyd, de 27 años de edad.

A Bradley le ha sido ordenado testificar ante el panel después de que intentó evadir ser llamado a presentarse frente al gran jurado escudándose en el tratamiento médico que recibe a raíz de su lesión en febrero. Aún así, un juez emitió una orden de comparecencia, lo que hizo que Bradley apareciera en la corte para testificar.

No han surgido detalles sobre los procedimientos del gran jurado mientras que no sean abiertos al público, pero el panel quería saber más que nada detalles del altercado en febrero con Hernández, lo que causó que Bradley perdiera un ojo. Él ha estado buscando una compensación económica por parte del antiguo jugador de los Patriotas de Nueva Inglaterra a causa de su herida.

Bradley no se refirió a la prensa antes de su aparición en la corte y solo dio una declaración breve al USA Today. "Estoy bien, ha sido difícil, pero estoy bien. Tengo que llegar. Ya voy tarde", comentó Bradley.

Bradley señala que Hernández le disparó en el ojo luego de una discusión entre ambos a las afueras de Tootise's un club desnudista en Miami. Los motivos de su discusión todavía permanecen sin esclarecerse. Al principio, Bradley aseguró que Hernández le había disparado a propósito, pero su abogado, David Jaroslawicz dijo a USA Today que el hecho aún sigue confuso. "No sabemos si fue accidental o deliberado", dijo el abogado.

Según la denuncia, Bradley perdió el ojo derecho y tuvo que pasar por una gran cantidad de cirugías para reconstruir el área alrededor de este. La denuncia también indica que requerirá más operaciones para recuperar su salud total y que los costos médicos están aumentando.

Hernández no ha respondido a la denuncia y el abogado de Bradley dice que es crucial para ellos obtener su testimonio para que puedan saber o no si el disparo fue un accidente.

Bradley fue abandonado en una zona industrial en Riviera Beach, Florida, de acuerdo a la policía. Estaba sangrando profusamente de su herida y requirió atención médica inmediata. Ambos, Bradley y su abogado afirman que fue dejado en ese lugar porque se le creía muerto.

Bradley asegura conocer a Hernández desde hace bastantes años y que en algún momento trabajó para él.

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