El vínculo entre la comida chatarra y la obesidad infantil no es algo nuevo; sin embargo, un nuevo estudio realizado por la Universidad del Estado de Ohio señala que también existe relación directa entre el consumo de comida "basura" y el rendimiento escolar.
Kelly Purtell, directora de la investigación señala que los científicos basaron sus resultados en otros factores para determinar la calidad de dieta de los niños, como: demasiadas horas delante de la televisión, la situación socioeconómica de la familia, la falta de ejercicio físico o diversas circunstancias del colegio y el vecindario; sin embargo, el resultado sigue siendo concluyente.
El estudio realizado a 11, 740 estudiantes de Estados Unidos señaló que los niños entre diez y once años que consumen habitualmente comida chatarra, tres cursos después obtenían notas más bajas en un 20 por ciento que los niños mejores alimentados.
Los expertos descubrieron que los alumnos que incluían moderadamente la comida rápida en su dieta -entre una y tres veces a la semana- sólo registraron menores rendimientos en la materia de matemática.
La explicación que dan los investigadores es que la comida rápida o comida basura es baja en nutrientes como el hierro, el cual ayuda al desarrollo cognitivo, e incorpora demasiadas grasas y azúcar, las cuales afectan negativamente a la memoria y la facultad de aprendizaje, según señaló Muy Interesante.