En Georgia, una mujer de nombre Tsiuri Kavaratskhelia ha conservado en su propia casa el cuerpo momificado de su hijo Joni Bakardze durante 18 años, después de que este muriera a causa de una sobredosis a la edad de 22 años.
De acuerdo a un artículo compartido por la revista TVNotas, la muerte de Joni Bakardze dejó una gran herida emocional en Tsiuri Kavaratskhelia quien tomó la decisión de momificar el cuerpo de su hijo para ella misma darle mejores cuidados a los que pudo haber recibido en un panteón.
La madre del joven indicó a los medios de comunicación locales haber tenido un sueño en el que se le indicó la forma de conservar a través de vodka el cuerpo de su hijo.
"Yo tuve un sueño donde alguien me decía que comenzara a usar vodka para cuidar el cuerpo de mi hijo. Llevo usando alcohol durante años", indicó la madre al mostrar el cuarto en donde estaba el cuerpo de Joni Bakardze, además de abrir su féretro y mostrar el estado en el que estaba su hijo, dentro de la casa ubicada en la localidad de Zugdidi.
En el video que se comparte en la red de Youtube se puede observar que las cámaras tomaron el cuerpo del joven por completo en donde se aprecia vestido, con guantes blancos y la cara cubierta de la misma forma. Al momento de mostrar el cuerpo, Tsiuri Kavaratskhelia dijo que él "Era un buen hijo y un buen marido, pero miren cómo ha quedado".
La ropa que lleva portada el cadáver del joven es para que no quedara su cuerpo al descubierto y además la mujer explica que con esto ella puede tener un "grato recuerdo del joven".
El sitio de internet también comparte algunos otros casos similares al de Joni Bakardze, iniciando por el de la familia de Christopher Blackburn de la localidad de Penwortham en Inglaterra, quien tenía el cadáver de su padre en su casa durante 5 meses, con la intención de lograr cobrar cerca de 41 mil pesos en beneficios.
También el cadáver del señor Clarence Bright se mantuvo en la casa de su hijo Vincent Bright dentro de un congelador luego de haber sido exhumado, por lo que tuvo que pagar una fianza de 75 mil dólares. En ambos casos, el artículo señala que los familiares se aferran a los muertos con la falsa esperanza de que puedan regresar a la vida.
