La histórica y anticipada pelea del siglo ahora está en los libros. El peleador invicto de 38 años, Floyd Mayweather Jr., salió del MGM Grand Las Vegas el sábado por la noche aún invicto -- 48-0.
Del otro lado del mundo, la celebración que comenzó con la esperanza de que Manny Pacquiao venciera al mejor de todos terminó; el banquete, sin importar lo grande o preparado, dejó un sabor agrio en las bocas que quienes celebraban.
Los 100 millones de filipinos en todo el mundo, naturalmente, querían que su héroe fuese el ganador, pero, ninguno de sus deseos importan ahora. Los resultados se han entregado, y el triumvirato de jueces de la pelea reveló una decisión unánime en contra del querido campeón.
Una revancha sería su única gracia. Pero, la decisión no está en sus manos, y las probabilidades están en contra de otra pelea.
Primero, el contrato no estipula ninguna cláusula de revancha. Manny Pacquiao incluso confirmó esto antes de la megapelea en una entrevista con ABS-CBN News. Pero, no todos lo aceptan.
Entrando a la pelea, algunas personas que se pusieron el sombrero de teorias conspirativas, estaban tan convencidos entre sí de que sería un empate y eso llevaría a una revancha. Las especulaciones estuvieron llenas, como dijo Sports Illustrated, de que el resultado de esta pelea estuvo acordado desde el comienzo. Será un resultado sin ganador donde los dos campeones serán victoriosos en una revancha que será incluso más grande y rica que la primera.
Resulta que los conspiradores no tendrán sus momentos de "te-lo-dije."
Si Mayweather hubiése perdido la pelea, habría una mayor oportunidad de otro combate. Este enfrentamiento, para algunos críticos, significa más para Floyd, cuyo legado de grandeza se predica en base a ser invicto. Una derrota contra Pacquiao socavaría su idea de ser "El Mejor de Todos."
Pero, eso tampoco fue el caso. Floyd ganó, y hay una buena probabilidad de que no se arriesgará tanto de nuevo. Ya había cedido a los deseos de muchos de hacer la pelea realidad, en primer lugar.
Y, después está la animosidad entre ambos peleadores. Los dos boxeadores pudieron haber mostrado respeto mutuo por el otro, pero eso no significa que las personas detrás de ellos y sobre las negociaciones fueron amables y amigos entre sí. Movieron cielo y tierra para hacer la pelea posible, y no parece que tengan ganas de volver a asociarse.
"Una revancha está tan lejos," dijo el jefe de Top rank, Bob Arum, según la Associated Press. "Y la idea de que tengo que lidiar con estas personas de nuevo es algo en lo que no quiero pensar."
Mientras tanto, si le preguntas al señor Mayweather, padre y entrenador de Floyd, sobre una posible revancha, te diría que no es necesaria. "Lo que va a pasar no requiere una revancha... confía en mí," dijo vía la Associated Press antes de la pelea.
Para una pelea de esta magnitud y peleadores de este calibre, la idea de una trilogia, seguramente, suena apetecedora para muchos. Solo podemos esperar que no cierren sus puertas.
¿Qué hay de ti? ¿Quieres ver a ambos peleadores en una revancha? ¿Estás de acuerdo con el resultado de la pelea? Por favor, comenta lo que piensas.
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