El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, decidió darse un descanso para conectarse con la naturaleza, y que mejor muestra de ello que degustar un pedazo de salmón crudo en compañía del afamado especialista en supervivencia Bear Grylls.
Aprovechando un viaje a Alaska, en el que hizo un llamado a la ciudadanía para que tome consciencia que tiene el impacto climático en la naturaleza, el primer mandatario estadounidense se integró a la filmación del programa Running Wild de la NBC, en el que Grylls somete a personalidades reconocidos a situaciones extremas de supervivencia, destaca Media ite.
Watch a sneak peek of @POTUS in the wild with @BearGrylls talking about climate change → https://t.co/eAVC9RjeMV https://t.co/iN73E8fqwL
— The White House (@WhiteHouse) septiembre 8, 2015
Pese al importante cargo que ostenta, Obama no escapó de pasar por una experiencia de la que ni su numeroso equipo de guardaespaldas pudo salvarlo, el cual quedó registrado en video.
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Con un imponente paisaje rocoso de fondo situado a la orilla de un río, se puede ver al político acompañado de Grylls. Ambos caminan por el escarpado terreno, en búsqueda de alguna clase de alimento.
Tras un corte de cámara, reaparecen sentados conversando amenamente, cuando el presentador televisivo saca de su mochila un trozo de salmón ensangrentado de su mochila y le empieza a explicarle a Obama las partes del filete que pueden aprovecharse, quien se limita a observar la carne ensangrentada con el ceño fruncido.
Grylls le explica que hizo el hallazgo en las inmediaciones del río, y que seguramente, la porción de salmón son las sobras del almuerzo de un oso. Para fortuna del quien es considerado el "hombre más poderoso del planeta", el famosos presentador decide improvisar un fogón y cocinar el pescado, en vez de ingerirlo crudo, como comúnmente lo hace.
"Sabroso. Ha estado bien, aunque habría estado mejor si lo hubiera acompañado con alguna galleta" señaló el dirigente demócrata, aunque puntualizó, no era necesario que supiera el origen del exótico manjar, rescata el sitio US Today.
Asimismo, declaró que las habilidades culinarias de Bear son a todas luces mediocres, aunque agradeció el hecho de haber comido algo que, por lo menos, tenía forma y sabía a ciencia cierta de dónde provenía.
La aparición de Obama en el show televisivo desencadenó una serie de rumores entre los televidentes, quienes comenzaron a especular sobre el tipo de retos que tendrá que superar.
Entre las posibles situaciones que causaron mayor expectación es la de si el presidente debería de tomar su propia orina, como ya lo han hecho otros invitados al programa. Las especulaciones llegaron a tal punto, que el mismo Bear Grylls tuvo que aclarar en su que no pensaba someter a su invitado a este desafío.
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