Valerie Weisler llegó a una conclusión hace 3 años: lo que realmente quieren y necesitan los adolescentes para enfrentar el bullying es 'Validación'. Hoy, con 17 años y finalizando la preparatoria, Weisler mantuvo su idea ante el mal año que vivió.
El divorcio de sus padres afectó en su confianza al entrar en la preparatoria, la convirtió en una persona tímida ante sus compañeros de clase al grado de que su apodo fue "muda".
"Los niños me llamaban muda, inventando rumores de que yo no tenía la capacidad física para hablar", explicó.
A pesar de eso, Weisler no dejó la idea que tomó a sus 14 años, fundó el proyecto "The Validation Project", donde su puesto es directora ejecutiva. La joven quiere que su movimiento global sea la premisa de que la afirmación positiva en los adolescentes ayude mucho en su vida y futuro.
El Proyecto empareja a adolescentes de 100 países con un tutor o mentor en empresas como Google o la revista Seventeen Magazine. Los mentores arman pareja con adolescentes que comparten pasiones o habilidades similares y trabajan juntos por un mínimo de cuatro horas a la semana durante dos meses.
Al término de la fase de tutoría, los adolescentes se comprometen a utilizar su pasión en un trabajo voluntario.
Aproximadamente 6.000 adolescentes de todo el mundo han participado hasta el momento.
Una joven, por ejemplo, tomó clases de baile con una bailarina profesional y luego enseñó la coreografía en un refugio para personas sin hogar.
Creciendo en un suburbio de la ciudad de Nueva York, Weislerdijo señaló que su vida cambió en 2013 cuando vio cómo otro compañero de clase era hostigado y acosado por sus compañeros por su sobrepeso.
"Me acerqué a él y le dije: 'tú importas'. Me dijo que tenía la intención de suicidarse ese día, pero lo que le dije 'realmente lo validó'", aseguró la joven.
Weisler fue a casa esa noche y googleo la palabra "validación" (validation), que a la postre inspiró el nombre de su organización. Empezó con sólo 25 dólares que usó para comprar un dominio web.
Dedica a la organización unas 40 horas a la semana durante las noches y fines de semana, y gracias a ello el proyecto tiene más de 900 secciones en escuelas de todo el mundo. Ganó el Premio Nacional Jefferson para la Paz y la Justicia, el cual le permitió viajar a siete países este verano para dar a conocer su proyecto.
La meta por ahora de Weisler es cumplir los 18 años y así poder registrar Validation Project como una fundación sin fines de lucro. De esta manera, las donaciones aportadas por la gente serán deducibles de impuestos. Ella misma reconoce las debilidades económicas, sin embargo, sigue con la frente en alto.
"El dinero sigue siendo un problema... Pero no lo necesitas en el banco. Ayuda, pero no es indispensable", aclaró.
Weisler comenta que toma decisiones desde su cocina, con las ganancias que obtiene cuidando niños y dando conferencias.
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