La precandidata presidencial por el partido demócrata, Hillary Clinton, reconoció que utilizar la expresión "inmigrantes ilegales" en el pasado fue "una mala elección de palabras", y prometió no volver a emplearla en sus próximos discursos.
Durante una sesión de preguntas y respuestas por Facebook, organizada por la cadena Telemundo, Clinton fue cuestionada por el activista José Antonio Vargas (un periodista indocumentado fundador de la organización "Define América"), quien consideró que este tipo de términos son ofensivos para la comunidad indocumentada en Estados Unidos, por lo que ha pedido a los precandidatos presidenciales que dejen de usarla.
"Esa fue una mala elección de palabras. Como he dicho durante toda esta campaña, las personas en el núcleo de este asunto son niños, padres, familias, Dreamers. Ellos tienen nombres y esperanzas, y sueños que merecen ser respetados", aseguró la precandidata demócrata, según rescata The Guardian en su portal web.
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De acuerdo con el mismo medio, Clinton ha llamado en el pasado a crear cambios en la actual política migratoria del país. La aspirante presidencial se ha pronunciado a favor de ampliar las acciones ejecutivas del presidente Barack Obama sobre la inmigración, así como reformar las leyes migratorias para proporcionar una vía hacia la ciudadanía de millones de indocumentados que viven en EE.UU.
Cabe destacar, sin embargo, que durante una reunión en el ayuntamiento de Windham, en New Hampshire, Clinton dio una respuesta sobre el problema de la inmigración y el control de la frontera con México en la que utilizó el término "inmigrante ilegal".
"Bueno, he votado en numerosas ocasiones cuando era senadora para gastar dinero en la construcción de una barrera para tratar de evitar que los inmigrantes ilegales entren al país. Creo que debemos controlar nuestras fronteras", aseguró Clinton, según cita la CNN.
En esa ocasión, la esposa del ex presidente Bill Clinton acotó que "es sólo que nunca va a suceder que deportemos a 1 o 12 millones de personas. No me importa que tan alto sea la pared o que tan grande sea la puerta, eso nunca va a suceder", destaca The Huffington Post.
La postura de Clinton contrasta en gran parte con la de los precandidatos presidenciales del Partido Republicano, quienes han mostrado en su mayoría una postura más dura contra la inmigración ilegal que la de los aspirantes demócratas a la presidencia. La mayoría de los precandidatos de ambos bandos ha utilizado el término "inmigrante ilegal" en sus discursos.
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