El ministro de Justicia de Turquía, Bekir Bozdag, ha anunciado este jueves que los resultados de las autopsias confirman el uso de armas químicas durante la masacre del 4 de abril en la ciudad siria de Idlib en la que murieron en torno a un centenar de personas, informa el diario turco 'Hurriyet'.
Según la información que barajan las autoridades turcas, las armas químicas fueron usadas de manera deliberada por el Ejército sirio y no pertenecían a las fuerzas rebeldes ni explotaron de manera involuntaria como consecuencia de un bombardeo, como aseguran desde Damasco y Moscú.
«Esta investigación científica ha demostrado que Asad utiliza armas químicas», señaló Bozdag hoy en referencia a las autopsias.
La intención de Turquía ahora mismo es la de llevar a cabo una investigación conjunta con la Organización Mundial de Salud (OMS) para averiguar exactamente el agente empleado en el ataque y que según fuentes militares estadounidenses podría tratarse de gas sarín, aunque este extremo no ha sido confirmado.
Ayer Médicos Sin Fronteras informó de que ocho heridos de Jan Shijún fueron atendidos en un hospital que recibe su apoyo en Bab Al Hawa, cerca de la frontera turca, «con claros síntomas -pupilas dilatadas, espasmos musculares, defección involuntaria- de exposición a agentes nerviosos como el gas sarín». La misma conclusión a la que llegó la Organización Mundial de la Salud (OMS) tras analizar los vídeos y fotografías y hablar con los miembros de la Asociación Médica Sirio Americana (SAMS), que cuentan con personal trabajando sobre el terreno.