(Photo : Administrar tus finanzas durante la pandemia del coronavirus: 5 consejos para tener en cuenta)
La pandemia de coronavirus está dañando nuestros bolsillos, así que es bastante comprensible que quieras asegurarte de que tus ingresos son suficientes para cubrir tus gastos y tal vez incluso ahorrar cierta cantidad para los días más críticos. Algunos de nosotros podemos permitirnos trabajar desde casa como si nada hubiera cambiado, pero no todos han corrido con la misma suerte. El 81% de la fuerza de trabajo global tiene su lugar de trabajo parcial o totalmente cerrado.
Para evitar caer en una trampa llena de luchas financieras, durante estos tiempos es muy importante que aprendas a ajustar tus gastos. Si nunca has elaborado un presupuesto, ahora es el momento indicado para que aprendas y sepas cómo equilibrar tus ingresos y gastos. Para ayudarte, hemos destacado a continuación las cuestiones más importantes que debes considerar para asegurar que tu dinero sobreviva hasta el arribo de tu siguiente cheque.
Cancela cualquier suscripción que no necesites
Como consecuencia del distanciamiento social y el cierre de muchos lugares, si tienes una suscripción a un lugar local como un gimnasio, cancélala al menos durante este período. Muchos negocios que han cerrado temporalmente han cancelado automáticamente las suscripciones de sus miembros, pero algunos podrían no ser tan considerados.
Echa un vistazo a tu estado de cuenta e identifica todas esas membresías y suscripciones que no necesites, y luego procede a cancelarlas. Después de la crisis, siempre estará la opción de que las renueves, pero no tiene sentido que en este momento pierdas dinero en ellas. Piensa en este tipo de gastos como las ramas bajas de un árbol que puedes cortar para que este tenga una vida longeva y sana.
No olvides revisar tus suscripciones en línea, pues es probable que tampoco necesites algunas de ellas. El objetivo de este pequeño ejercicio es mejorar tu flujo de dinero. Si me preguntas, esto es algo que deberías hacer habitualmente cada 6 meses, independientemente de la situación de crisis.
Continúa aportando dinero a tu fondo de emergencia
Espero que no hayas tenido que recurrir a tu fondo de emergencia todavía, pero si ya lo hiciste, ¡detente ahora mismo! Un fondo de emergencia es algo que esperas no tener que usar nunca, pero te alegrarás de tenerlo disponible cuando realmente llegue el momento en que lo necesites. Lo ideal sería que tuvieras entre tres y seis meses de gastos en tu cuenta de emergencia, asegurados y listos para usar en los días más difíciles.
Soy consciente de que puede ser difícil pensar en ahorrar dinero ahora mismo, pero es algo que debes hacer todo el tiempo si quieres asegurar tu estabilidad financiera.
Si estabas acostumbrado a destinar el 20% de tu sueldo a los ahorros, pero ahora te cuesta hacerlo, no seas demasiado duro contigo mismo, tan solo es cuestión de cambiar ligeramente de enfoque. En lugar de aportar una cantidad fija a tu fondo de emergencia el mismo día que recibes tu sueldo, mejor espera a hacerlo a final de mes. Una vez que hayas cubierto todos tus gastos, solo tienes que apartar el dinero que te sobre. Sí, tal vez no sea tanto como ahorrabas antes, pero peor sería no ahorrar nada.
Vigila tus gastos
Si antes no conducías tus gastos con un presupuesto, ahora es el mejor momento para empezar a hacerlo. Podría sonarte a que es un proceso complicado y largo, pero una vez que te acostumbres a él, te será fácil y le terminarás dando las gracias a tu yo del pasado por aprender a hacerlo.
La forma más sencilla de planificar tu presupuesto es anotando primero el dinero que recibes de todas tus fuentes de ingresos. Una vez que hayas anotado tus ingresos mensuales en una columna, crea otra columna donde monitorees tus gastos. Ahora bien, los gastos caen típicamente en dos categorías: necesidades y deseos. Gastos como el pago de tus cuentas, alimentos, hipoteca o renta caen en la categoría de "necesidades", mientras que tu suscripción a Netflix y la comida rápida se clasifican como "deseos".
Cuando llegue el final de mes, detente y analiza en dónde estás parado. Si fuiste capaz de cubrir todos tus gastos y aún así ahorrar algo de dinero, entonces no tienes nada de qué preocuparte. Pero si quieres reducir tus gastos, revisa tus "deseos" y ve a qué cosas podrías renunciar.
Otra forma de hacer un presupuesto es usando la regla 50/30/20. El 50% de tus ingresos se destina a las necesidades, el 30% a los deseos, y el 20% a tu cuenta de ahorros. Si logras mantener este ritmo, estarás un paso más cerca de la seguridad financiera.
Considera pedir un poco de ayuda
Si piensas que ahora mismo simplemente no puedes cubrir todos tus gastos, pero tienes la certeza de que todo mejorará cuando pase esta crisis, entonces podrías considerar pedir un préstamo personal. Por supuesto, lo ideal sería que pudieras recurrir a tus ahorros personales o fondo de emergencia para estos tiempos difíciles, pero si eso no es una opción, entonces un préstamo debería ser suficiente.
Sin embargo, ten cuidado de no morder más de lo que puedes tragar. Evita a toda costa endeudarte y pasar por más dificultades. Pide un préstamo que te ayude a cubrir tus necesidades y asegúrate de no gastar ese dinero en cosas innecesarias. Tendrás mucho tiempo para darte el gusto después de que todo esto haya pasado.
¿Debo seguir invirtiendo?
Si estás acostumbrado a invertir parte de tus ingresos, tal vez la situación actual del mercado de valores te asuste un poco. Si estás invirtiendo a largo plazo (es decir, con miras a más de 5 años en el futuro), lo mejor que puedes hacer es ir por lo seguro. Los expertos dicen que la mejor reacción a los movimientos caóticos del mercado es no reaccionar en absoluto, así que no olvides ese consejo. Tampoco es cuestión de que guardes todo lo que tienes y huyas, sino de mantener un ojo en el mercado y solo reaccionar cuando tengas la mayor certeza posible del resultado.
Hoy no es exactamente el mejor momento para trabajar en objetivos a costo plazo, por lo que si estabas planeando tomar dos meses de vacaciones e irte de viaje a la India el próximo año, sería buena idea que lo reconsideres y pospongas hasta nuevo aviso. Concéntrate en el presente y en tus objetivos a largo plazo hasta que todo empiece a volver a la normalidad.
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