Dos hombres y una mujer han sido arrestados por la Policía de Miami Beach acusados de mantener contra su voluntad a una niña de 13 años en un club nudista de esa localidad.
Vibert Jean, de 37 años, Marlene San Vicente, de 22, y DeWayne Ward, de 18 años, enfrentan varios cargos por trata de personas y entregar sustancias a menores de edad, según informó este jueves el Miami Herald en su portal de Internet.
De acuerdo con el mismo medio, la menor, identificada solamento como D.J, habría sido amenazada por los tres detenidos con un rifle de asalto AK-47 y una pistola calibre 40.
Bajo el nombre artístico de "Peaches", la menor de 13 años era obligada a fumar marihuana y beber alcohol y a bailar en el Club Madonna de Miami Beach, en donde generó ganancias por más de 1.000 dólares entre el 13 de diciembre de 2013 y el 4 de enero de 2014, según un reporte de la agencia informativa Europa Press.
Katherine Fernández Rundle, la Fiscal Estatal de Miami Beach, dijo a la CBS que "Todo este asunto es simplemente horrendo. No hay palabras para describir lo que estas víctimas están pasando".
El mismo medio dio a conocer que la policía encontró armas de fuego y marihuana en el club nocturno en el que la menor permanecía contra su voluntad.
El Miami Herald relató que la menor rescatada huyó de su casa el 10 de diciembre de 2013 en compañía de otras dos muchachas de 15 años de edad y se hospedaron en un hotel de Biscayne Bay, en el North Miami. En ese lugar se reunieron con un hombre que sólo se identificó como AP, quien les dijo que podría llevarlas a juna casa en la que podrían permanecer mientras estaban fuera de casa.
El hombre las llevó al 335 de la 55 Terrance del NE en Miami, lugar en el que conocieron a Ward, Jean y San Vicente. Al percatarse que eran menores de edad, Jean echó a las chicas de 15 años, pero D.J insistió en que tenía 18 años y fue aceptada en el lugar.
Durante su estancia, AP le propuso tener sexo con un hombre identificado como John por 80 dólares a lo que la menor aceptó. La niña dijo a la Policía que esperaba obtener la mitad del dinero, pero AP no le dio ninguna suma.
Luego de negarse a prostituirse una vez más, D.J fue obligada a bailar por dinero, en un bar exótico, trabajo por el que no recibió ninguna remuneración.
Finalmente la madre de la menor alertó a la Policía de Miami Beach sobre el paradero de su hija y el martes se organizó un operativo en el que pudo ser liberada.