Una reina de belleza y su madre demandaron al Departamento de Policía de Nueva York (DPNY) por $210 millones después de que denunciaran abusos cometidos por los agentes del cuartel 32.
La dominico-americana Kristy Abreu (actual Miss Westchester 2013), quien tiene 19 años edad, y su madre, Kendy Paredes, de 38, dijeron que el 5 de mayo su auto fue detenido por la policía en el Calle 145 West y la Octava Avenida, cerca de las 9 p.m., por una infracción menor. Después de un "fallo informático", fueron detenidas y encarceladas por la sospecha de conducir un auto robado, reportó el New York Journal. La reina de belleza acusó al DPNY de actuar como "cerdos". Todos los agentes eran hombres, informó el Daily News.
Los agentes presuntamente registraron y esposaron a las dos mujeres. "Cuando llegamos al cuartel empezaron a reírse de nosotras", dijo la reina de belleza al Daily News. La mujer dijo que los agentes les pusieron apodos como "niña bonita" o "pequeña perra llorando", y que fueron tratadas "como animales".
De los 15 o 20 agentes involucrados en el arresto, solo había una mujer. Ella ayudó a Abreu a lavar su cabello y secar sus lágrimas, dice la demanda. Durante su arresto, las dos mujeres reportaron no haber recibido agua, comida o acceso al cuarto de baño.
Miss Westchester dijo que para ser liberadas tuvieron que demostrar la propiedad del auto. Finalmente fueron puestas en libertad a las 5 a.m., ocho horas después de haber sido detenidas. El abogado, Jack Yankowitz, dijo que el papeleo de su Honda Civic 2006 está en orden y que a las mujeres no se les leyeron sus derechos Miranda y nunca fueron acusadas de algún crimen. "La cultura de fuerza excesiva y abuso que este cuartel involucra es indignante. Están barriendo gente inocente y dulce", comentó Yankowitz.
De acuerdo al Daily News, Abreu y su madre tienen la intención de entablar una demanda por $210 millones por daño físico y emocional, humillación y privación de los derechos civiles, entre otras cosas.
"Esta sido por mucho la experiencia más aterradora que he vivido y me persigue todos los días. No mostraron ningún tipo de respeto. No les importó. Solo espero que la comunidad tenga conocimiento de las formas en las que la policía acosa a las personas y las hace sentir mal. Estaba en una pesadilla", señaló Abreu al Daily News.
