First Posted: Jan 07, 2015 04:30 PM EST

Mia Khalifa es la estrella de cine para adultos mejor calificada en el sitio PornHub, pero también se ha convertido en el foco de severas críticas e incluso amenazas de muerte debido a su origen libanés.

Khalifa, de 21 años de edad, es una joven nacida en Beirut, pero desde pequeña vivió en Estados Unidos y recientemente, en el 2014, inició su carrera profesional en la industria del cine pornográfico en EE.UU, algo que no cayó nada bien a sus padres, pero tampoco a un sector conservador de su país.

Según rescata el diario The Independent en su portal web, la joven no sólo no ha ocultado su ascendencia, sino que incluso lleva tatuado en el brazo la primera línea del himno nacional libanés, el cual se tatuó pata "mostrar solidaridad con los puntos de vista políticos de mi padre después de un atentado en Líbano en 2012," lo que ha provocado la furia de los sectores más conservadores.

La polémica carrera de la joven ha provocado también que su propia familia se distancie de ella y de sus acciones. A través de un comunicado, citado por la CNN, la familia de la estrella porno dijo que espera que "vuelva a sus sentidos", y que sus acciones no muestran los valores de sus familiares.

"Probablemente estamos pagando el precio de vivir lejos de nuestra patria; nuestros hijos tuvieron que adaptarse a las sociedades que no se parecen a nuestra cultura, tradiciones y valores. Por lo tanto, insistimos en distanciarnos de sus acciones, que no reflejan las creencias de sus familiares, su educación o sus verdaderas raíces libanesas. Esperamos que vuelva a sus sentidos, pues su imagen no honra a su familia o a su tierra natal, Líbano", escribió la familia según cita la CNN.

En las redes sociales de la joven, cientos de personas han dejado comentarios críticos e incluso amenazadores, en lo que personas aseguran que quieren cortarle la cabeza por lo que está haciendo. Sin embargo, muchas personas también se han solidarizado con Khalifa, como el autor británico-libanés, Nasri Atallah, quien escribió en su cuenta de Facebook que "La indignación moral acerca de Mia Khalifa, presumiblemente la primera estrella porno libanesa, es errónea por dos razones. En primer lugar, como mujer, ella es libre de hacer lo que le plazca con su cuerpo".

"En segundo lugar, como un ser humano sensible, que vive al otro lado del mundo y se hace cargo de su propia vida, no debe absolutamente nada al país donde a ella le tocó nacer. Es extraño que esta percepción de ser libanés es una vocación y un deber primero y que su vida personal ocupa el segundo lugar", destacó The Independent.

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