El gobierno de Washington se ha sumado a los estados de Illinois y California y desde el próximo 2014 otorgará licencias de conducir a residentes indocumentados, según dieron a conocer este lunes medios locales.
De acuerdo con información publicada por el Nuevo Herald, el alcalde de Washington, el demócrata Vincent Gray, dijo el pasado fin de semana que este lunes 18 de noviembre firmará una ordenanza que permite al Departamento de Vehículos de Motor del Distrito de Columbia emitir licencias a personas que no puedan comprobar su estatus legal en los Estados Unidos.
El mismo medio informa que la ordenanza entraría en vigor a partir del próximo 1 de mayo de 2014. De no intervenir el Congreso, lo que los especialistas consideran poco probable, los residentes indocumentados que radiquen en Washington podrán obtener las licencias para conducir exclusivamente en ese estado.
La medida se suma a los esfuerzos realizados por otros diez estados de EE.UU que permiten a los inmigrantes que trabajan en el país poder conducir de manera legal.
Cabe destacar que los permisos emitidos para inmigrantes no prueban el estatus legal de las personas, por lo que no podrán ser utilizadas para ningún otro propósito federal que el de conducir.
Aunque hasta el momento no se han dado a conocer mayores detalles sobre el procedimiento necesario para solicitar un permiso de conducir para residentes indocumentados en Washington, los analistas explican que no sería muy diferente al solicitado por Illinois, estado que otorgará licencias de manejo temporales a inmigrantes a partir de diciembre.
Según dio a conocer recientemente la agencia informativa EFE, para obtener la licencia de conducir en el estado de Illinois cada uno de los inmigrantes deberá haber habitado en el estado mínimo un año, realizar un pago de 30 dólares y presentar una identificación o un documento con nombre, fecha de nacimiento y firma del interesado, por lo que se espera que en Washington el procedimiento sea similar.
Por el momento sólo 10 estados estadounidenses permiten a los inmigrantes que viven en el país sin autorización el derecho a conducir legalmente.
