"No importa cuán pequeño seas, lo importante es la actitud". Esa es la frase que los padres suelen decir a los hijos cuando son los más pequeños de un salón de clase y los ayuda a levantar su autoestima.
Esta es una lección que no solo los humanos aplican, también este cachorro quien defiende su tazón de comida de un perro al menos siete veces más grande que él.