Antes, los niños ricos y herederos millonarios sólo podían ser vistos en televisión; ahora gracias a las redes sociales, la gente menos favorecida puede darse cuenta de la realidad de estos jóvenes millonarios.
Mientras un adolescente promedio estudia y trabaja para pagarse sus gustos, algunos niños ricos están acostumbrados a la extravagancia, así que mucho de lo que nosotros consideramos lujos, ellos lo toman por sentado como su vida cotidiana.
Aquí te damos algunos ejemplos mostrados en la cuenta Rich Kids of Instagram:
Relojes
A pesar que los relojes ya no son tan indispensables como en tiempo atrás debido a la incursión de los celulares, muchos siguen siendo considerados como un accesorio de lujo, para presumir riqueza y buen gusto. Los niños ricos siguen esta tendencia portando relojes de marca como Versace o Louis Vuitton.
Limusinas
Muchas personas comunes utilizan el transporte público, otros más afortunados tienen la posibilidad de costear un auto, pero los niños ricos están acostumbrados a las limusinas, autos lujos a su disposición a cualquier hora y sin ningún tipo de restricción. En ocasiones estos vehículos son tan extravagantes como prácticos, pues algunos vienen equipados con WiFi.
Si tú haces la tarea en el autobús, ellos la hacen en estas oficinas rodantes.
Aviones Privados
Y siguiendo con la línea del transporte, los niños ricos no se conforman con un asiento en la ventanilla del avión en primera clase, ellos tienen aviones privados disponibles con todas las comodidades posibles.
Los jets privados ofrecen asientos tan cómodos que puedes dormir en ellos sin ser molestado por tu acompañante. Y lo más importante, estas opciones de viaje proporcionan privacidad llena de lujos que permite experimentar el mejor de los viajes, sin importar el destino.
Tarjetas de Crédito
Si bien la gente ordinaria también tiene tarjetas de crédito, los herederos millonarios las tienen al por mayor, sin importar cuándo es la fecha de pago, teniendo siempre una disponible para cualquier gasto que se les pueda presentar, por más trivial que este sea.
Alcohol
Para los jóvenes millonarios, el costo de una botella de alcohol no significa nada. Poner 600 tragos encima unos de otros es algo fácil de conseguir. Este es el vivo ejemplo de un lujo sin sentido, pues aunque es parte de la diversión conseguir este tipo de extravagancias, realmente no se valora el disfrutar de un buen licor si se le ingiere como si fuera cualquier bebida.
Televisiones De Última Generación En Todas Partes
Una televisión en una habitación es suficiente, pero para los niños ricos no. Algunos de ellos necesitan hasta cuatro para estar satisfechos, ya que pueden tener varios dispositivos en cada uno o disfrutar de varios eventos al mismo tiempo. Si bien no es la mejor opción para relajarse o concentrarse en una sola actividad, ellos prefieren tener opciones y no sentirse limitados en ningún sentido.
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