Las escusas para negarse a no tener sexo utilizadas por las mujeres pueden ser múltiples y en ocasiones ni siquiera saber la razón concreta por la cual no tienen ganas de estar con su pareja y simplemente se sienten indispuestas.
El cansancio, las preocupaciones y los pendientes; pueden ser algunas de las razones o simplemente cambios hormonales que trae la maternidad, la edad o el estrés. Sin embargo, si la negación se convierte en una situación recurrente, es claro que algo no anda tan bien y ni cuenta se están dando.
Los encuentros sexuales pueden ser una de las causas más comunes de la falta de ganas de tener sexo, ya que el acto sexual suele genitalizar la sexualidad cuando la pareja se enfoca a dar placer a los órganos externos sin que exista juego precoital, lo que causaría que la pareja sienta que no es tomada en cuenta en lo efectivo, llevando a la relación a un conflicto.
La falta de apetito sexual también es un problema que puede ser causado por el consumo de drogas o medicamentos, además de los cambios hormonales presentados durante la menopausia.
Algunas soluciones recomendada por expertos para enfrentar la falta de deseo sexual se presentan a continuación:
- La comunicación con la pareja. Si bien el tema es delicado, el buscar culpables o evadir responsabilidades es el error más común en la pareja. La falta de comunicación sólo empeora la situación y lleva al aislamiento, a intentar buscar enfrentar el problema a solas. El ser honesto para decir lo que nos gusta y no durante el sexo es una opción para evitar mayores problemas en el futuro.
- Evitar forzar a la pareja. Tener relaciones sexuales es algo que se debe de disfrutar y forzar un acto íntimo solo empeorará las cosas y decir "no" podría causar molestia a la pareja en el momento, pero evitará complicaciones futuras.
- Analizarse emocionalmente. Al saber nuestra situación emocional, reconocer los errores y los problemas internos e individuales; es necesario para ubicarnos en el lugar correcto del conflicto y descubrir la razón por la cual no se desea estar con la pareja.
Los problemas en pareja siempre tienen solución pero la separación es la forma más fácil de solucionar. Lo más recomendable es reconocer el problema a tiempo, platicarlo con honestidad y plantear lo que se espera, recordado que siempre hay algo que dar y hacer, poner lo mejor de uno para mejorar la relación. Si el conflicto es más fuerte, lo mejor es acudir a expertos.
