Uno de los dos estadounidenses contagiados con ébola, el doctor Kent Brantly, quien fue infectado con el virus mientras trabajaba con enfermos en Liberia, fue dado de alta de un hospital en Atlanta, informó este jueves la organización humanitaria para la que trabaja.
De acuerdo con un reporte de la NBC, Brantly había sido tratado con un medicamento experimental desde el pasado 2 de agosto, cuando ingresó a los Estados Unidos en avión y en medio de fuertes medidas de seguridad.
Pocos días más tarde, la misionera norteamericana Nancy Writebol, infectada con ébola durante su estancia en áfrica, también fue ingresada en el mismo hospital que atendía a Brantly. Ambos fueron tratados con una medicina experimental, droga que hasta antes del más reciente brote únicamente había sido probada en monos, destacó la CBS en su portal web.
De acuerdo con el mismo medio, Alison Geist, portavoz de Samaritan´s Purse (organización para la que Brantly trabaja), dijo a The Associated Press que el médico sería dado de alta este jueves, sin embargo, no reveló detalles sobre la situación de Writebol.
A través de un comunicado, citado por la CBS, Franklin Graham, presidente de Samaritan´s Purse, dijo el grupo estaba celebrando la noticia y aseguró que "sé que el Dr. Brantly y su maravillosa familia les pedirían que recen por esas personas en áfrica que están luchando, tratando y sufriendo por ébola. Aquéllos quienes han renunciado a las comodidades del hogar para servir al sufrimiento de los menos afortunados son sólo el principio de esta batalla".
Este miércoles, la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó a 1,350 el número de personas fallecidas por ébola en Guinea, Sierra Leona, Liberia y Nigeria, en lo que se considera el brote más mortífero en la historia del virus.
Las autoridades médicas de Estados Unidos dijeron que la segunda paciente infectada con ébola está siendo atendida, pero no revelaron más detalles sobre su condición.
